Enséñame a escribir de nuevo. Como cuando hacíamos el amor con versos.
De mi cuaderno al tuyo, de mi corazón a tu cabeza, de tus manos a mi cadera.
Enséñame a escribir de nuevo, como cuando mezclábamos palabras y besos con lengua.
De mi dolor al tuyo, de mi cuerpo a tu garganta, de tus líneas a mi alma.
Dibujé tu cara con la punta de mis dedos y tus deseos con la tinta de una pluma imaginaria.
Sudor y versos. Palabras enredadas en la boca y en el alma, para convertirse en poesía por la mañana.
No recuerdo dónde fue, ni con qué rimaba, pero recuerdo palabras, recuerdo caricias donde ahora hay nada.
Palabras que pesan, que confunden, que molestan.
Palabras que duelen, versos que matan, poemas perdidos.
Los dejamos romperse, los dejamos perderse, en un mundo ahora escondido.
Enséñame a escribir de nuevo, de mi recuerdo... a tu imposible olvido.
168 lecturas prosapoetica karma: 29