Borges repetía, estupendo, estupendo, luego se quedó pensando y dijo; estupendo parece venir de estúpido. También le decía a Núñez qué nunca leía los periódicos, Núñez sólo bebía cerveza y más le interesaba charlar con Samuel, quizás porqué le gustaban las armas, estuvo un tiempo largo en la cárcel por asesinato.(mató a otro hombre, de seis disparos de revólver).
De pronto sé fue del lugar, pensando quienes carajos serían estos tipos qué estaban en lo de Núñez. Cuándo llegó a su casa más o menos a veinte metros de halli, sé sentó a la mesa a comer con su madre, no le dijo nada acerca de la conversación qué escuchó, tampoco a su tío cuándo fueron a pescar a la noche.
Núñez cuándo está borracho suele contar qué bebió cerveza con un tal Samuel Colt y escuchó hablar a Borges. Por supuesto nadie le cree.