No es el mar
el que destruye los castillos
en la arena.
Piensa en el peso
de las sombrías
profecías; huecos
agoreros de penumbras
disfrazados de brisas
con salitre. Esas pálidas
gaviotas que agitan
sin cesar
sus alas negras
y ríen con graznidos
y rompen la inocencia
de las nubes.
No, no es el mar
el que destruye los castillos
en la arena.
Recuerda aquellas sonrisas
perdidas en la infancia,
y los miedos...
a lo alto y lo profundo,
al horizonte y las mareas.
Los ojos apagados que
culpan
de la noche a las estrellas.
No, no es el mar...
183 lecturas versolibre karma: 112
y si el mar se los lleva, que los devuelva, cargados de sal poética !!
Bellos versos Rraffa !
Abrazos, querido amigo!
sin cesar
sus alas negras
y ríen con graznidos
y rompen la inocencia
de las nubes
Una obra de arte.
excelsa pluma compañero!Saludos.
Excelente.
Abrazo
Un abrazo.
Un abrazo.
Los ojos apagados que
culpan
de la noche a las estrellas.