En una hoja de papel
amarilla por el tiempo
encontré unos versos escritos
con amor para ti.
Recuerdos vinieron a mí
de tus vesos dulces,apasionados
la fricción de nuestros cuerpos
qué luego caían agotados.
Hay!!! cajoncito, porqué te habri,
porqué? sí nada estaba buscando,
sí hacía tiempo qué te perdí,
cómo hojas qué el viento va llevando.
Mejor guardo él papel del cajón
de nuevo voy a cerrarlo,
qué se haga la noche de golpe
y mañana cantare mí dolor y quebranto.

Mañana, mí guitarra también,
melodías, estará desangrado.