“Hundir las manos en el agua
del tiempo. Ir al fondo
del futuro que pasa.”
(Julia Uceda)
¿Acaso es el tiempo el que pasa…?
¿Acaso son los días
que te atropellan…?
O eres tú, quizás,
la que camina
apresurada
por la superficie
inclinada
de unos días
que van cayendo
de uno en uno
como hojas de árbol,
que arrastra el viento
por otoño.
Y se desprenden
inadvertidamente
de tu piel
los sueños, los deseos,
los íntimos anhelos
y secretos
que acariciabas
en silencio
como un bello
tesoro
por abrir.
Y un día, adviertes,
que te dejaste
atrás
la dicha o la tristeza
de momentos
que viviste
y que ahora
se escapan.
Las personas
que amaste
y que te amaron,
la nostalgia
de lugares
que habitaste,
que fuiste recorriendo
a lo largo
de los años…
se esfuman en el aire.
Y hundes tus manos
en el agua
del tiempo.
Miras tus manos
que se vacían
y tiemblan,
con un temblor
sutil
e imperceptible.
Tus recuerdos
resbalan,
se derraman
hilo a hilo
por tus ojos
como fuente
gota a gota.
Y ajena a tu equipaje
te preguntas
en qué momento
…se te escurría
la vida…
Y sigue yéndose
en silencio
como el agua
de un río
que se aleja,
casi sin darte cuenta.
Queda…
beber despacio el tiempo que te quede.
Texto y foto:
María Prieto
Mayo 2020
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Un abrazo, amigo!
Tus recuerdos
resbalan,
se derraman
hilo a hilo
por tus ojos
como fuente
gota a gota.
Gracias, amigo, un abrazo fuerte
Nuestra vida transita en la senda del tiempo cambiando también, día con día!
Hermosos versos! Bello poema, María!
Abrazos afectuosos!
beber despacio el tiempo que te queda.
Hermoso María...abrazos.
Y cuando te das cuenta María... quizás atisbas el mar o el recodo de esa orilla que debemos sortear...
Al frente... y sin mirar a esa mar.. aguas nuevas, barcas que van y que vienen y orillas a las que amar y que siempre nos detienen.
¡Para qué mirar atrás, María... si en la barca que es la vida, llegaremos a esa mar, entre barcas que van y vienen, al albur de esas orillas...!.
Abrazos.
Gracias, compañero! Abrazos para ti.
No te miento al decirte que dudo, que anteriormente hayas hecho un poema
mejor que este, que llegue tan hondo haciendo sonar como cuerda de violines
las fibras del alma de los sentimientos humanos.
Felicitaciones.
Un fuerte abrazo
Besitos, MM
Un abrazo fuerte de vuelta, poeta!
saludos María
Abrazos, amigo.
Esas preguntas retóricas resuenan como campanas dolientes.
¡Abrazos!