¿Recuerdas cómo empezó todo?
Cruzábamos la puerta
ávidos de oxígeno y agua,
sólo para retomar fuerzas;
un alto en el camino del esfuerzo
y la tristeza.
Fue sutil engaño:
entrar sedientos de amor
y dejarnos la libertad y los años.
El refugio se tornó cárcel,
la ansiedad nos hacía daño;
de las alas a la tela de araña.
Precioso, el verdadero amor
que conjuga la libertad con cuidado
y no excede límites sanos.
Funambulista en equilibrio
de las emociones no es esclavo,
avanza ligero y diestro sobre la verdad.
252 lecturas versolibre karma: 92
entrar sedientos de amor
y dejarnos la libertad y los años.
Precioso poema, compañera!!!
Qué bonitos versos!
Muy bien, excelente.
"¿Recuerdas cómo empezó todo?
Cruzábamos la puerta
ávidos de oxígeno y agua,
sólo para retomar fuerzas;
un alto en el camino del esfuerzo
y la tristeza."