...
Aquella tarde imaginé mi vida:
dulce y evocada hacia un milagro,
disparado en la razón por una gota de polvo.
Me detuve en seco, tenía miedo. Lloré
y estuve a punto de escribir, de escribirme.
Respire por ti, por los lados, por los costados
por las gradas y la gente,
por lo dura que está la vida.
Pensé en el vuelo, y morí bueno, viví un poco más.
Quería solo contarte que estoy muerto,
quizá más muerto que tú, que ella,
casi herido por las golondrinas, casi al borde
del nacimiento de los nísperos,
agotado por las letras, los párrafos, el agua.
Me he quitado la vida y por mí circundan
las gotas de las fisuras.
Quemado, iletrado, sin huellas, así vivo, así muero,
a ratos, a cuentagotas, con pus y astillas.
Así vivo, con púas,
intentando, apenas, seguir, sobrevivir, o sobremorir.
etiquetas: romántico, lírico 126 lecturas versolibre karma: 86
Abrazos compañera.