@jordan997

El amor empieza primero en tu hogar. Con pequeños gestos, una palabra de aliento, una sonrisa aunque esa persona no lo merezca, o perdonar a ese familiar que nos ha causado mucho daño para poder ser libres de ese resentimiento. Si puedes amar a los tuyos de sangre, podrás amar al resto. El amor es sacrificio, cuesta, transforma, purifica, alza...solo fíjate como una madre no le importa perder su vida en el parto por su bebé, como no le importa desvelarse por las noches para cambiarle los pañales, amamantarlo y como un padre sale todos los días a trabajar largas jornadas bajo el sol hasta doler todos sus huesos, tan solo para que sus hijos salgan adelante, tengan sus necesidades básicas, etc. Eso es amor, olvidarse de uno mismo por el bien del prójimo. Porque realmente lo que importa antes de dejar de existir es lo que dimos desinteresadamente a otros, lo bien que hicimos sentir a otros. El amor es silencioso no hace tanto ruido como las guerras intelectuales y físicas pero esta presente, siempre será más fuerte y siempre triunfará. Haz pequeños gestos de cariño a diario sin esperar nada a cambio, sin esperar que te reconozcan, empieza con los de tu sangre, y poco a poco te encontrará, y no te soltará.

Saludos cordiales desde
San Antonio, Texas.

Enid Rodríguez Isáis.