Como si de un calambre se tratara
la locura inunda mi cuerpo
y comienza una nueva política:
La dictadura del corazón.
Donde la sangre lleva flores
a un cerebro incomprendido
que tendrá que ser sometido
a las exigencias del amor.
Y con el paso de los daños,
la felicidad se ha vuelto a arruinar.
Otra oportunidad fallida,
un engaño más.
El corazón se ha dado de baja
de su política fracasada,
donde el cerebro debió liderar.
etiquetas: poemas, poesia, amor, desamor, corazon, cerebro 111 lecturas versolibre karma: 109