Cae la noche
y me abraza la distancia,
soy como un barco
que no llega a su destino.
Allá en tus labios
se ha quedado mi sonrisa;
le entrego mis reproches
al camino.
Cae la noche
y yo siento las estrellas
quemándome
con sus fuegos encendidos;
para llevarme de prisa
hacia el invierno
donde me espera con sus garras
el olvido.
Cae la noche
y ya nadie me levanta;
me cuesta estar
a un lado del camino.
Entre los versos
que vienen a buscarme,
parece ser mi alma
un remolino.
Cae la noche
y yo al mirar la luna
voy juntando mi nombre
hecho pedazos.
¿Dónde andarán las risas
que danzaban,
felices de albergarse
entre tus brazos?
Cae la noche
y yo quedo pensando
que llegará
con prisa la mañana;
para traerme de nuevo
los veranos
que irán atravesando
mi ventana.
Tu olvido
es esa voz
que me acompaña,
y se siente cerquita
de los ojos.
Cuando tu voz se vuelve
madrugada,
se prende a mis oídos
como abrojo.
¿Dónde hallaré
la miel de tu sonrisa,
esa que era una fiesta
para mi alma?
Cae la noche
y viene tu recuerdo,
con tanta tempestad
para mi calma.
574 lecturas versolibre karma: 80
Saludos.
Saludos!!!